Uno de los principales factores que ralentiza o impide la venta es la diferencia entre el valor de tasación y el precio en que se oferta.

Algunos efectos de sobrevalor las propiedades al momento de vender son:

• Incremento del tiempo de venta
  
• Menor atractivo e interés para los compradores
  En un entorno digitalizado los compradores comparan varias propiedades en el mismo sector antes de decidir cuál visitar. Una sobrevaloración vuelve inmediatamente menos atractiva tu propiedad.
• Dificultades para obtener financiamiento
  El banco o institución financiera definirá el monto a otorgar al comprador sobre la base del valor de tasación, no del precio de venta.
• Descuentos forzados y venta bajo valor real
  Si la propiedad no se vende, eventualmente tendrás que reducir el precio. Esto hará que el mercado reafirme la sobrevalorización inicial y que recibas ofertas de compra por valores aún más bajos.
• Costos adicionales
  Mantener una propiedad en venta durante un periodo prolongado puede implicar costos como pagos de dividendos, mantenimiento, impuestos, servicios básicos, gastos comunes, etc.
• Percepción negativa del mercado
  Una propiedad que permanece en venta por mucho tiempo genera una percepción negativa y crea dudas sobre su valor real o posibles problemas ocultos.

Conocer el verdadero valor de tu propiedad te permitirá evaluar si es el momento adecuado para vender o si es mejor esperar.

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